Algunas personas me preguntan por qué digo siempre aquello de: «Es posible emprender seriamente sin perder el espíritu de juego y el sentido del humor» 
¡Porque creo que es posible!
Además, le cuento un poquito más.
Primero, creo que es posible emprender sin perder el espíritu de juego. Cuando jugamos, nos animamos, nos atrevemos porque sólo está el disfrute en juego, el compartir con los compañeros de juego. Me gusta pensar en el proceso emprendedor como algo similar.
Segundo, creo que es posible emprender sin perder el sentido del humor. A veces nos hacen reír las cosas más dramáticas y difíciles de la vida, ¡y el humor nos salva, nos seca las lágrimas! El humor carga energías, recicla ideas y ¡genera actitud positiva! Me gusta pensar en el proceso emprendedor como algo similar.
Ahora sí, vamos, vamos, que es hora de seguir jugando 
Con afecto,
Paola.-